Linkbuilding con cabeza para empresas de software y tecnología
Todas las empresas de tecnología buscan visibilidad online. Y cuanto más arriba sale una empresa en los resultados de Google, mayores son las posibilidades de hacerse un hueco en la mentre de los clientes potenciales. Pero el SEO no va solo de meter palabras clave o cambiar cuatro títulos. Una parte clave de él, muchas veces incomprendida, es el linkbuilding o construcción de enlaces.
Llevamos años trabajando para empresas de tecnología. Posicionamiento de marca, diseño web, publicidad online, generación de leads… Incluso nosotros, como agencia, trabajamos nuestra visibilidad online. Por eso podemos decir que, cuando entiendes bien el linkbuilding y lo trabajas con cabeza, funciona y da resultados que impactan el SEO.
¿Qué es el linkbuilding y por qué nos interesa?
Básicamente, se trata de conseguir que otras webs relevantes enlacen a la tuya. Google lo interpreta como una recomendación: si alguien habla de ti y te enlaza, será por algo. Y si lo hacen webs potentes, con autoridad en tu sector, mucho mejor. Y cuanto más fuerte y creíble sea esa web, más peso tiene ese enlace.
Esto, bien hecho, aporta valor en dos ámbitos:
- Visibilidad orgánica (más tráfico sin pagar por clics). Sales mejor posicionado en Google, y eso significa más clics sin tener que pagar por cada uno.
- Autoridad. Si medios, partners o referentes del sector te enlazan, ganas en credibilidad y tu marca se posiciona mejor también en la mente del cliente.
Y en tecnología, donde los ciclos de venta suelen ser largos y es difícil convencer a los clientes, la confianza lo es todo. Y la confianza, hoy, también se construye con enlaces.
Sabemos que la competencia actuales brutal. Da igual si vendes un ERP, ciberseguridad o un software para logística: seguro que hay otras diez empresas con una propuesta similar. Y aquí no se trata solo de aparecer, sino de diferenciarse.
Además, muchos aún lo hacen mal o directamente no lo hacen. Hay empresas con productos buenísimos que no invierten nada en SEO, o lo dejan en manos de agencias que van a volumen y no entienden el sector. Ahí hay una oportunidad clara: si tú lo haces bien, puedes destacar sin pelearte a codazos por cada lead. Por eso el linkbuilding es una forma de decirle a Google (y al mercado) que no solo existes… sino que vales la pena.
¿Y cómo sabes si lo estás haciendo bien? Un pequeño ejemplo de éxito
Aquí es donde entran dos métricas de SEO para supervisar el impacto real de los enlaces en la visibilidad: el índice de visibilidad y el authority score.
El índice de visibilidad te dice, básicamente, cuánto se te ve en Google. Mide cómo aparece tu web para un conjunto de palabras clave importantes para tu negocio, teniendo en cuenta la posición media y el volumen de búsqueda. Si sube, vas bien. Si baja, algo falla.
El Authority Score, por su parte, mide la credibilidad y autoridad de tu dominio. Va de 0 a 100 y se calcula combinando el volumen y calidad de los enlaces que recibes, tu tráfico orgánico y si tu web muestra o no señales de spam. Cuanto más alto sea, más fácil lo tendrás para posicionar frente a tus competidores. En el caso de una PYME tecnológica, un authority score de 25 o 30 es bastante apropiado en fases de crecimiento, mientras que un score entre 30 y 40 demuestra ya la solidez de la marca.
No hace falta obsesionarse con los numeritos, pero sí usarlos para ver si lo que haces (crear contenido, colaborar, salir en medios…) realmente está ayudando a que tu web gane peso.
Por ejemplo, en el caso de uno de nuestros clientes, la publicación paulatina de 23 enlaces en un periodo de año y medio multiplicó por 3 el índice de visibilidad de su sitio web.
Algunos de los enlaces les ayudaron también a posicionarse para ciertas temáticas y palabras clave en las que todavía no se habían hecho hueco

¿Pero cómo conseguimos enlaces que valgan la pena? ¿Qué estrategias de linkbuilding funcionan?
Vamos a lo práctico. Lo que mejor nos ha funcionado en estos años ha sido:
1. Crear contenido útil de verdad
No hablamos de «las 5 ventajas del ERP» escritas con ChatGPT. Nos referimos a contenido con fondo:
- Guías prácticas bien explicadas
- Casos reales de implementación
- Artículos técnicos escritos por alguien que ha estado en proyectos
- Entrevistas con expertos del sector
- Estudios internos con datos propios
Ese tipo de contenido no solo posiciona, también da ganas de enlazarlo.
2. Colaborar con gente del sector
Entrevistas cruzadas, webinars, eventos, posts compartidos… todo eso genera relaciones y, muchas veces, enlaces. Si colaboras con alguien que ya tiene visibilidad, parte de su audiencia acaba conociéndote.
3. Publicar en medios o blogs especializados
Aquí no se trata de salir en todos lados, sino de elegir bien. Mejor un artículo en un medio del sector industrial que cinco en blogs genéricos de tecnología. Y si puedes aportar una visión concreta (por ejemplo, un caso real de automatización con IA en un sector especializado), más fácil será que genere interés.
Para uno de nuestros clientes, por ejemplo, ha conseguido aumentar su visibilidad del 0,85% al 2,61% en Google en año y medio con la publicación paulatina de 24 enlaces.
4. Compartir datos propios
Cuando publicamos estadísticas internas o sacamos conclusiones de un análisis real de proyectos, hemos visto que otros sitios nos enlazan sin pedirlo. Los datos exclusivos son oro. Y todavía más en la actualidad, puesto que la mayoría de contenido no es más que un refrito de lo que ya existe en la red.
Cierto, un análisis con cifras internas toma más tiempo, pero el retorno de inversión, cuando se hace bien, es mucho más positivo que pedirle al becario de turno que te cree cuatro artículos generalistas.
5. Estar presente en comunidades
No hablamos de dejar enlaces como un loco en foros (a nadie le gusta el spam). Nos referimos a participar activamente en grupos de LinkedIn, Slack, Reddit o Discord, respondiendo preguntas, compartiendo experiencias.
Si lo haces bien, la gente termina compartiendo tu contenido por sí sola y puedes posicionar a tu empres e incluso a ti mismo como experto reconocido en estas comunidades.
Lo que no hay que hacer (y que puede ser tentador)
Aquí va la parte en la que hablamos de atajos. Porque todos caemos alguna vez en promesas fáciles:
Comprar enlaces baratos
Rápido, barato… y muy mala idea. No os dejéis embaucar. Muchos vienen de webs sin sentido, y Google ya se ha aprendido el truco. A la larga, hacen más daño que beneficio.
Para asegurarte de la calidad del enlace, analiza bien el sitio web (dominio) de dónde viene, su adecuidad en relación con tu negocio, la calidad de los contenidos que se publican en él… Y aléjate de aquellos en que el contenido esté generado al 100% por la IA. Las últimas actualizaciones de Google ya apuntan a que penalizarán en breve este tipo de enlaces.
Dejar el SEO en manos de alguien que no entiende tu negocio
Muchos de nuestros clientes han pasado por ello.
Una agencia de marketing que trata principalmente con ecommerce, y empresas B2C, pero que no entiende tu sector, ni tus ciclos de ventas, ni el perfil de tu buyer persona. En la mayoría de casos, los resultados son grandes volúmenes de contenido que ni atraen ni generan ningún tipo de interés comercial.
Intentar ir demasiado rápido
El linkbuilding es un trabajo constante. Publicas, colaboras, aportas valor… y poco a poco empiezan a llegar los resultados. No es inmediato, pero es sólido. Publicar demasiados enlaces de golpe puede levantar alertas de spam en Google, lo que puede generar resultados inversos a los que estamos buscando.
Es mejor publicar dos enlaces al mes durante seis meses, que 12 enlaces de golpe en un solo mes.
Cómo ha cambiado todo con la IA
Hoy en día, con herramientas como ChatGPT o Copilot, es fácil (¡demasiado!) generar textos. El revés de la moneda es lo que se conoce como slop, contenido plano y poco útil que inunda la red.
Por este mismo motivo, los enlaces buenos ahora valen más que nunca. Si publicas algo que realmente ayuda a alguien (y que nadie ha hecho hasta ahora), se nota. Y genera enlaces.
Eso no implica que no puedas usar la IA para mejorar tu contenido. Claro que sí. Pero el enfoque, y el punto de vista, eso sigue siendo cosa tuya. Y ahí es donde está el valor.
Algunos consejos finales, desde la trinchera
- No busques enlaces, busca aportar algo que merezca ser enlazado.
- Colabora con quien habla tu idioma (tecnológico y sectorial).
- Mide lo que haces, pero no te obsesiones. Hay enlaces que traen tráfico. Otros traen reputación. Ambos importan.
- Evita atajos. Lo barato sale caro, especialmente en SEO.
- Y sobre todo, sé constante. El linkbuilding es una carrera de fondo, no un sprint.
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